top of page

El despertar de un hombre




Mis dedos en el río

se mimetizan con mi alma

que con tal de encontrar calma

necesitan sentir aquel frío


Será el tiempo una ilusión

me pregunto con frecuencia

intentando no perder la paciencia

en una duda llena de contradicción


Nada es certero ya

nada dicta a mi ser

que ha dejado de parecer

y dejo que el agua fluya


Y así con las horas

el hombre fue despertando

sus raíces en tamaño incrementando

nutriéndose de risas cantoras


Decidió no quedarse quieto

la naturaleza lo fue abrazando

y sus sentidos afinando

por un instante se sintió completo


Su vida se lleno de colores

paso de ser camello a león

pudo gritar su canción

y a flor de piel resaltaron sus amores


Pudo sentir una quietud interior

acompañada de una presencia

infinita en cuanto a la ciencia

un Dios melódicamente liberador


Desde ese día que toco el río

su despertar fue determinante

¿despertar de qué?

¿cuándo estuvo el hombre dormido?

bottom of page